miércoles, 10 de noviembre de 2010

~72.

No me gusta que me acaricien cuando estoy de mal humor. Lo detesto.
Los días que llueve, abro la ventana de mi habitación de par en par, me siento en la encimera con las piernas cruzadas y respiro fuerte. Hasta que siento que cada gota está retumbando dentro de mi pecho, dándome vida.
Soy torpe, muchísimo. Y nunca me canso de tropezar una y otra vez en el mismo escalón. Porque me cuesta mucho aprender de las caídas, pero poco a poco, lo consigo.
Siempre he pensado que los mejores planes, son los de última hora. Por eso nunca se me ha dado bien preparar cosas de antemano.
Adoro el otoño, ver como se van quedando desnudos los árboles y oír crujir las hojas secas bajo mis pies.
No suelo sentirme orgullosa de mi misma, normalmente no encuentro razones para ello.
Nunca digo nada que no sienta. 
Y jamás de los jamases, celebraré San Valentín, básicamente, porque para mí, carece de sentido.
¿Por qué demostrar que quieres a alguien ese día? Pudiendo hacerlo los 365 días del año...






Tardes de invierno, escondida entre mantas.






Little M.

No hay comentarios:

Publicar un comentario